Retrato del duque de Wellington, por Thomas Lawrence, Museo Wellington de Londres.

Como Arthur Wellesley puede resultar desconocido, pero no como duque de Wellington, título que le otorgó en 1814 el rey Jorge III de Gran Bretaña, por sus victorias contra las tropas francesas durante la Guerra de la Independencia, aliados entonces los ingleses con los españoles.

Y fue el mismo rey, el mismo año y por los mismos motivos quien le concedió el título de marqués del Duero, marquess of Douro en inglés.

En España, agradecida al prestigioso militar, ya se le había conferido el ducado de Ciudad Rodrigo en 1812. Y en otros países diversos títulos nobiliarios como el de príncipe de Waterloo, ya que en esta batalla fue el vencedor definitivo sobre Napoleón.

Atención pues, con este marqués del Duero, referido al río portugués que también dio nombre al marquesado concedido al general Manuel Gutiérrez de la Concha, por la soberana española Isabel II, en este caso por la intervención española en 1847 en un conflicto militar del país vecino.

Un año más, la Asociación SAN PEDRO ALCÁNTARA 1860, recuerda al fundador de nuestro pueblo, Manuel Gutiérrez de la Concha, primer marqués del Duero, el 27 de junio, fecha de su muerte, en el año 1874, en la batalla de Monte Muru (Navarra), siendo general en jefe del Ejército liberal frente a la insurgencia reaccionaria carlista.

El acto, que comenzará a las 21 horas, consistirá en la izada de las banderas de España y de Andalucía, en la rotonda donde se encuentra la escultura del marqués del Duero.

En el transcurso del mismo, se entregará un diploma acreditativo de socios de honor a las familias de don José Moreno Naranjo y don Manuel López Gómez, por su excepcional contribución y trabajo continuado en pro y en defensa del patrimonio histórico, la cultura y las tradiciones de San Pedro Alcántara, según acuerdo adoptado en la Asamblea General de 12 de junio pasado.

Colaboran: Hermandad del Patrón y Tenencia de Alcaldía.

En este año de 2018, en torno al Homenaje anual al marqués del Duero, fundador de San Pedro Alcántara, hemos querido aumentar el conocimiento en torno a la figura del atrevido empresario, e ilustre militar y político con la publicación en facsímil de una obrita publicada por el actor y dramaturgo José Carbia en La Habana en 1874, Acción de Estella y muerte del Ilustre marqués del Duero, de la cual no se han podido localizar ejemplares en bibliotecas públicas de España y cuya única referencia la teníamos a través del prestigioso Manual del librero Hispano-Americano de Antonio Palau, algo más que una recopilación de catálogos de libros antiguos, ya que sus valiosos índices por temas y autores son utilizados por los historiadores en la búsqueda de bibliografía, y cuyos últimos datos indicaban que se vendía en el año 1934 por 2 pesos, mientras que en otro catálogo de la Librería Victoria Vindel se cotizaba a 4 pesetas en 1900.

No obstante, Manuel María Feijóo lo encontró en la Biblioteca Nacional José Martí de La Habana, por encargo de José Antonio Moreno, quien nos relata la larga aventura en busca del libro. Por otra parte, Domingo César Ayala, quien comparte con Moreno pasión por la literatura y por la historia de San Pedro Alcántara, acompaña este facsímil con un comentario histórico-literario sobre el mismo. Gracias a los tres por su valiosa colaboración para conocer esta obra de teatro dedicada al marqués del Duero.

En el siguiente enlace se puede consultar el libro, editado por la Asociación San Pedro Alcántara 1860 y la Hermandad de San Pedro de Alcántara, y que fue presentado el 22 de junio.

 

Acción de Estella y muerte del ilustre Marqués del Duero

Antonio Manuel Moral Roncal ha publicado, 2017, una breve biografía del marqués del Duero. En realidad el libro es un resumen de otro suyo, 2014, titulado El general Manuel Gutiérrez de la Concha: una espada liberal en las guerras carlistas, obra distinguida con el Premio Ejército, un excelente estudio sobre la experiencia vital del general Concha en el ámbito militar y político, y en menor medida el empresarial (léase la colonia de San Pedro Alcántara).

Este nuevo libro del profesor de la Universidad de Alcalá de Henares es una buena oportunidad para acercarse, de forma sintética,  a la trayectoria vital del marqués del Duero. Con algo más de cien páginas, además de numerosas y seleccionadas ilustraciones, forma parte de una colección de bolsillo de Ediciones 19, y en la cual no podía faltar su figura entre los volúmenes dedicados al Ochocientos, como elemento relevante de la milicia y la política española de esos años.

Sorprende, por otra parte, la amplitud de miras de Moral, por acercarse a San Pedro Alcántara en la actualidad. Al principio del libro, acompañando una fotografía, 2016, del homenaje anual que se realiza el 27 de junio al fundador de nuestro pueblo, escribe “¿Quién fue este personaje español del siglo XIX que aún hoy es capaz de recibir homenajes públicos, unir gobiernos y oposiciones municipales, sin provocar polémica por el matiz civil y religioso de los mismos?”

De igual modo, al final, la bibliografía recoge publicaciones de historiadores locales, que junto con la Hermandad del Patrón o la Asociación San Pedro Alcántara 1860, han profundizado y divulgado la figura del marqués del Duero, y ha ayudado a que investigadores nacionales dispongan de mayor información para elaborar la semblanza de Manuel Gutiérrez de la Concha.

El periódico San Pedro Información, del mes de marzo de 2018, publicó un cuestionario enviado por el profesor Antonio Manuel del Moral, a instancias del periodista Carlos Lima.
Para ver las imágenes a mayor tamaño clicar sobre las mismas.

EL MARQUÉS DEL DUERO

Manuel Gutiérrez de la Concha e Irigoyen fue un militar de gran prestigio (alcanzó el grado de capitán general) y un político de alto nivel (presidió el Senado durante varias legislaturas). Pero para nosotros su importancia radica en que fue el fundador de San Pedro Alcántara.

Durante la década de 1850 compró numerosas fincas en los términos de Marbella, Estepona y Benahavís, y donde sólo había cortijos aislados levantó un pueblo. Tres calles: Duero, Lagasca y Pizarro con más de cien casas, desembocaban en una plaza donde edificó la Casa Administración (luego llamada de Robledano y que actualmente no existe) y una iglesia.

En su gran finca de más de 3.000 hectáreas, el marqués experimentó con nuevas plantas y abonos, pero sobre todo cultivó caña de azúcar, por lo que construyó para su molienda una moderna fábrica en lo que ahora es El Ingenio.

Planeó una densa red de carriles y un eficaz sistema de regadío con embalses y acequias que llegaban a gran parte de las tierras del latifundio. Proyectó una granja-modelo o escuela de capataces en un antiguo molino de azúcar, el Trapiche de Guadaiza, con profesores especializados. Además, adquirió maquinaria moderna en distintos países de Europa.

La colonia de San Pedro Alcántara, que así se llamaba la finca, fue reconocida por el Gobierno por sus innovaciones agrarias como un modelo a imitar en el conjunto atrasado del campo andaluz.

Los sampedreños debemos agradecer a este militar y político, metido a empresario, la fundación de lo que hoy es San Pedro Alcántara.

EL 27 DE JUNIO Y LA COLUMNA DE ABÁRZUZA

A pesar de tener más de sesenta años, el general Manuel de la Concha, nuestro marqués del Duero, se puso de nuevo al servicio de España para combatir a los carlistas, que pretendían reimplantar en nuestro país una monarquía absolutista.

Nombrado jefe del Ejército del Norte obtuvo importantes victorias en el País Vasco y se disponía a dar la batalla definitiva en Navarra contra los facciosos, cuando fue herido de muerte en la tarde del 27 de junio de 1874 en Monte Muru, municipio de Abárzuza. Conducido a la casa solariega de la familia Munárriz, donde tenía establecido su cuartel general, falleció poco después.

La columna, cuya fotografía acompaña a este texto, se encuentra en ese lugar. En la ladera de Monte Muru, al borde la carretera que llega hasta el pueblecito de Abárzuza. Fue levantada cinco años después de su muerte como recuerdo al héroe caído en el campo de batalla. Una columna truncada, como rota fue su vida por el amor a la patria. En el pedestal hay varias inscripciones, entre ellas un retrato del marqués del Duero y su escudo nobiliario, parecido al que se encuentra en el Paseo de las Palmeras de San Pedro Alcántara.

Debido a esa fecha, cada 27 de junio se recuerda al fundador de nuestro pueblo.

Este año a la Hermandad de San Pedro de Alcántara se une, como en otras ocasiones, la Asociación San Pedro Alcántara 1860. Con actos que culminarán con la imposición de una corona de laurel en la escultura del marqués del Duero en la rotonda situada detrás de la iglesia.