Inauguración de una fuente en avenida Oriental, julio de 1961, muy necesaria cuando muchas casas no disponían de agua corriente. Destaca en la imagen el párroco don Francisco de Paula Espada, entre otras autoridades locales. Macetas, cojines y hasta un crucifijo en la fuente.
Foto publicada en el libro “San Pedro Alcántara. Recuerdos de un pueblo y su patrón”.

Febrero
Autorización a Melchor Conde Cabrera para una fábrica de bebidas carbónicas en la carretera de Ronda.

Abril
José López López, por construir fuente pública [calle Lagasca esquina con Nueva], 3.984 pesetas.
Andrés López Lozano, por la fontanería, 990 pesetas.

Julio
Gastos para una fuente pública en la avenida Oriental [esquina con Fuente Nueva], materiales y trabajo del albañil José Muñoz Rodríguez, 3.000 pesetas.
Materiales y trabajo de fontanería, Andrés López Lozano, 870 pesetas.

Agosto
Autorización a Rogelio Rodríguez Martín para abrir un establecimiento para la venta de cemento y material de construcción en calle 19 de Octubre [en la actualidad entre esta y Juan Ramón Jiménez].

Archivo Municipal de Marbella.

 

Presentada por Moisés Collado Pérez, vecino de la Alcoholera, actual barrio de El Ingenio, para instalar un surtidor marca “SATAM”, en la puerta de la citada Alcoholera, al borde de la carretera Málaga-Cádiz.
No sabemos si fue autorizada y se instaló. Lo que sí se deduce del documento es que Collado lo hace a título particular y no como empleado de la sociedad azucarera, propietaria de la colonia de San Pedro Alcántara.

“SATAM” es abreviatura de la empresa francesa “Societé Anonyme pour Tous Appareillages Mécaniques”.

 

Algunos de estos surtidores antiguos, que funcionaban a mano, se pueden comprar en la actualidad por internet.

Archivo Histórico Provincial de Málaga.

 

En la zona llamada “Pabellón Obrero”, que estaría frente al molino, en la carretera de Ronda a la salida de San Pedro Alcántara, residían 3 familias en 1924, que aumentaron a 12 en 1935 y a 24 familias en el año 1940.
Poco más tarde, el nombre de “Pabellón Obrero” se cambia por el de “Los Catalanes”, con sólo 4 familias en 1945, entre ellas las de Miguel Parra y Antonio Calderón, además de algún trabajador calificado como serrador.

Pocas noticias más tenemos de ese cambio de nombre. Para intentar buscar alguna explicación he aquí una relación de los más jóvenes de ese año 1940, y que ahora podrían tener en torno a 90 años:
María y Gonzalo Santaella Santaella
Isabel y José Martín García
Antonio Peña Rivero
Catalina, Antonio, José y Juan Vázquez Biedma
Juan y Encarnación García Durán
Francisco y Francisca Ramos Segura
Ana Rivero Macías
Francisco y Antonio Reina Rivero
Antonio, Manuel y María González Jiménez
Ana, Isabel, Francisca y Antonia Macías Rivero
Ana y Francisca Sánchez Caravante
Andrés y Antonio Parra Rodríguez

 

De 1959 disponemos de varios planos de 8 viviendas promovidas por Norberto Goizueta en Los Catalanes, en febrero de 1959, calle Almendro; en el barrio sólo había una parte edificada paralela a la carretera de Ronda, el resto eran parcelas.
El año coincide con el de la apertura del hotel Guadalmina, propiedad de la familia Goizueta, así que las viviendas corresponderían a los empleados del establecimiento, según hilo abierto en el grupo “San Pedro Alcántara. Fotos y vídeos de siempre”, por Cristóbal Gálvez Ortega (16/2/2021), donde numerosas personas intervinieron para contar sus experiencias como trabajadores del hotel y residentes en los pisos de la calle Almendro, para familias.
Además, existían unas naves con camas para solteros, hombres en la planta baja y mujeres en la alta, en la calle Peral.
Archivo Municipal de Marbella.

 

La disponibilidad de teléfono en San Pedro Alcántara a mediados del siglo XX era muy reducida, en la oficina de la Sociedad General Azucarera y poco más. Es por ello, que en septiembre de 1949 los vecinos reclaman la instalación de teléfonos, y el Ayuntamiento de Marbella los solicita a la CTNE, Compañía Telefónica de España, “ya que sus habitantes contribuyen enormemente al desarrollo del comercio y la industria de aquel gran núcleo de población”. Un mes después, el concejal Joaquín Amores insiste en el tema, pero la compañía responde que no puede ser porque hay sobrecarga de tráfico.

En 1953 el recordatorio es de otro concejal sampedreño, Fernando Caracuel, pero no es hasta 1958 cuando el Ayuntamiento se pliega a las condiciones de la CTNE, esto es la aportación de 1.440 kilogramos de hilo de cobre, una subvención de 99.100 pesetas, un local con vivienda para el encargado de la centralita y su familia, además del locutorio para el público en general.

Por fin, el alcalde Ricardo Lucena inaugura, el 28 de julio de 1959, la centralita en la Villa de San Luis, que prestará servicio a los teléfonos que se instalarán en los domicilios de los abonados y a las personas que acudan al locutorio. Un servicio mejorará en diciembre de 1963, al ponerse en funcionamiento la central automática construida en la calle Marqués del Duero.

Archivo Municipal de Marbella.

 

Entrevista a Fernando Alcalá Marín, ganador del premio “Guillén Robles” del Colegio de Abogados de Málaga, por su trabajo “Apuntes para una historia económica de Marbella en el siglo XIX”.
En el estudio se centra sobre todo en dos temas, las ferrerías de Río Verde y la colonia de San Pedro Alcántara.

En el artículo destaca la figura del marqués del Duero como el personaje que ha dejado mayor huella en la comarca de la costa occidental malagueña.

La parte dedicada a la colonia la ampliaría en su libro sobre San Pedro Alcántara, publicado en 1979.

Sol de España, octubre de 1976

Archivo Municipal de Marbella