La Feria de 1898 en San Pedro Alcántara tuvo un programa con actividades dignas de una gran población: iluminación eléctrica, proyección de cuadros disolventes (parecidos a diapositivas), lidia de un novillo de muerte, además de la tradicional procesión (que entonces era del patrón seguido de otras imágenes de la iglesia), los fuegos artificiales y el baile en la plaza. Y por si fuera poco, ese año se inauguró el hospital de la colonia, que completaba el seguro que disfrutaban los habitantes, que cubría médico y medicinas a cambio del uno por ciento de su salario. Fue una feria imponente.
El artículo publicado en el programa de la Feria de 2018 explica todo esto con más detalle:
Artículo de la Feria de 1898 en el programa de 2018
Seguramente en esa época ya estaban allí mi abuelo Pablo Marcial Robledano Egaña y mi tío Juan Robledano Ruiz.