«Todos ellos románticos en el doble sentido de revestir características típicas de este movimiento cultural, entre ellas el individualismo, así como en el sentido de sentimentales, generosos y soñadores. Claro que, a todas estas adjetivaciones podríamos añadir otras muchas. Fueron ambiciosos, qué duda cabe. ¿Leales? Según con quién y en qué momento. Crueles como todo hombre de la guerra, pero no más que sus contemporáneos. Egocéntricos como todos los salvadores de la patria. Valientes hasta la temeridad. Austeros en la escasez, pero amantes de la abundancia cuando hubo ocasión para ello. Y, por supuesto, fieles al código de honor, tan enraizado entre los militares hasta el extremo de no dudar en enviar a los padrinos a quien a su parecer lo hubiera mancillado».
De esta forma define Fernando Fernández Bastarreche, profesor de la Universidad de Granada y uno de los especialistas más relevantes de la historia militar de España, a los espadones de nuestro siglo XIX en las primeras páginas de su libro publicado en 2007.
Se está refiriendo a los cinco con mayor protagonismo en los acontecimientos militares y políticos de ese siglo: Espartero, Narváez, Serrano, O´Donnell y Prim. Pero indudablemente hay otros espadones, como Manuel Gutiérrez de la Concha, que alcanzaron grandes cotas de poder y comparten características.
De él y de lo que significó en la historia de su tiempo, hablará Fernández Bastarreche el próximo jueves día 11 a las 8 de la noche en la Casa de la Juventud de San Pedro Alcántara, en la conferencia titulada «Don Manuel Gutiérrez de la Concha: un general liberal en la España de Isabel II».
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